Lo que interesa retomar de este
esquema es que en el núcleo de aquello que somos se encuentra el orden
imaginario y con este, en la imagen y la fantasía, que tienen su punto de
partida en la imagen reflejada en el espejo. De este modo, logramos ser y saber
lo que somos.
El estadio del espejo está allí
en nuestro interior conformándolo, dándole vida, llenándole de “fantasmas” que,
aunque provienen de lo real, siempre lo desplazan, lo modifican, lo alteran,
distanciándose en algún grado. (La imagen funciona como un tropo; por ejemplo:
como metáfora, metonimia, sinécdoque.) (Nusselder, The surface effect,
2013)
Sin embargo, la imagen –y lo
imaginario- una vez que han salido virtualmente hasta el espejo se niegan a
regresar sin más. Por el contrario, inician un largo recorrido hasta nuestros
días. Tratemos de señalar los hitos de la secuencia que parte del paso de la
imagen especular a la fotografía hasta desembocar –por el momento- en los
lentes de Google.
Se requiere de una amplitud de la
mirada que solo será posible si nos centramos en aquello que consideramos el
aspecto central de cada una de las fases, con la convicción de que su
entendimiento pleno ha requerido y requerirá de una multitud innumerable de
estudios, como ha sucedido con la fotografía.
Considero que en este par de
siglos las marcas relevantes y estructuradoras de períodos bastante definidos
son: fotografía, imagen-movimiento (especialmente el cine), pantalla, realidad
aumentada. Debe tomarse en cuenta que son estadios acumulativos, en donde cada
uno que capturado en el siguiente; y, además, cada uno persiste en su propio
espacio con su propia evolución, lo que dificulta su comprensión global, como
es el caso del paso de la fotografía analógica a la digital.
Fotografía: congela la imagen
especular, el ojo fotográfico segmenta la realidad que captura y permite que
este fragmento de lo real pueda trasladarse a un ámbito distinto del que
surgió; por ejemplo, aparecer en un periódico. Desde luego, la mirada
fotográfica está penetrada enteramente por un régimen de la sensibilidad
proveniente del entorno cultural y a su vez, se convierte en un elemento
privilegiado de dicho régimen. (Barthes, 1990)
Imagen-movimiento: la imagen
fotográfica es puesta en movimiento, de manera simulada. Se reintroduce el
tiempo en la imagen, no solo como referente sino como algo dado inmediatamente.
De este modo, se crea junto a la realidad otra realidad, en este caso
imaginaria, virtual. Aquí la ilusión y lo ilusorio estallan en millones de
pedazos, de películas, videos, audiovisuales, videoclips. Por esa misma razón,
lo que está en juego en la imagen movimiento es el porvenir de la ilusión:
¿tenemos derecho a la ilusión?, ¿de qué modo es posible?, ¿ha triunfado
definitivamente el simulacro?, ¿la sociedad del espectáculo es un callejón sin
salida en donde la ideología del
capitalismo tardío se realizado plenamente? (Cubitt, 2004)
Pantalla: la electrónica permite
el manejo cotidiano de la imagen lo más cercanamente posible a cada uno de
nosotros. La gran pantalla de cine se empequeñece y la tenemos frente a
nuestros ojos prácticamente todo el día: computadoras, laptops, tablets,
celulares, smartphones… Estas pantallas se han convertido en interfaces que
hacen de mediadores entre nosotros y la realidad, entre nosotros y los otros.
Ciertamente interfaces inteligentes: software que es ante todo la concreción de
un concepto y de una imagen del mundo sobre un soporte electrónico. El software
piensa la realidad de un determinado modo, introduce una nueva ontología en el
mundo. (Nusselder, Interface fantasy. A lacanian cybor
ontology., 2006)
Realidad virtual: este es el
momento en que vivimos, todavía muy inicial, tanto que quizás el nombre
escogido no expresa todas sus potencialidades y riesgos. La imagen deja de
estar allá fuera, a una cierta distancia de los ojos y se aproxima tanto que
prácticamente se fusionará con nuestro aparato visual. Podemos decir que es la
realización plena de la fase ciborg de la imagen. La imagen como prótesis.
Cuadro 1. Del espejo a los lentes
de Google.
IMAGEN
|
CARACTERÍSTICA PRINCIPAL
|
Fotografía
|
Fragmentación de la realidad.
|
Imagen-movimiento
|
El porvenir de la ilusión
|
Pantalla
|
La imagen como interface
|
Realidad virtual
|
La imagen como prótesis
|
Bibliografía.
Barthes, R. (1990). La cámara lúcida. Buenos
Aires: Paidós.
Cubitt, S. (2004). The cinema effect .
Cambridge, Ma. : MIT Press.
Deleuze, G. (1984). La imagen-movimiento. Estudios
sobre cine 1. . Buenos Aires: Paidós.
Nusselder, A. (2006). Interface fantasy. A lacanian
cybor ontology. Amsterdam: F&N Eigen Beheer.
Nusselder, A. (2013). The surface effect.
London: Routledge.